7.19.2011

Amigos

Y si, llega el día y si bien se suele decir que el día del amigo no es uno en particular sino todos los que se comparten, llega el 20 y me pongo a pensar.
Trato de acordarme de todas las personas a las que me gustaría saludar y siempre corro el riesgo de dejar a alguno por ahí perdido. Y no es por falta de sentimiento, sino porque por suerte hay muchos y mi mente es frágil.


Así que sin nombres quiero agradecer:
- A los que  van y vienen, por momentos, por épocas, pero por ahí andan siempre.
- A los que están siempre, desde hace tiempo y cotidianamente, en el día a día.
- A los que van llegando nuevitos, que tímidamente se van acercando y empiezan a hacerse un lugarcito casi sin darnos cuenta.
- A los que marcaron nuestras vidas con gestos, palabras, silencios.
- A los que se quedaron al lado sin tener que pedirlo.
- A los que nos dieron aire cuando respirar se hacía imposible.
- A los que lastimé y perdonaron.
- A los que están lejos pero los siento tan cerca.
- A los que reencontré después de varias temporadas.
- A las que se vinieron por las rutas cantando a los gritos una y otra vez alguna canción vergonzosa.
- A la que compartió horas de manejo con risas y lágrimas.
- A los que me dieron trabajo.
- A los que confiaron en mi silencio para compartir algún secreto.
- A las que llaman el domingo para salir disparando a tomar un mate por algún pueblito.
- A los que hacen de los almuerzos de trabajo un momento esperado.
- A los que arman cadenas de mails interminables.
- A los que llaman a la madrugada.
- A los que no llaman nunca.
- A los que se quejan de todo.
- A los que heredé
- A los que son mi familia de sangre y amigos por elección.
- A los que me hicieron tomar vinito con queso.
- A la que me hizo la torta de naranja.
- A la que me hizo descubrir el helado de tramontana.
- A los que pararon palitos en el bosque energético.
- Al que le gané haciendo yacaré en una playa de Brasil.
- Al que hizo asados para chuparse los dedos.
- Al que me dice obsoleta pero viene a casa a escuchar discos.
- A los que Benancio les da alergia.
- A los que mandan musiquita por mail.
- A los que trabajan conmigo todos los días y ceban ricos mates.
- A la que me pide que baje a tomar cafecito.
- A las que vinieron con Mecha.
- A la que vino a aeroparque mil tardes a ver los aviones.
- A los que se bancaron un viaje de 39 horas en micro roncando.
- Al que me trajo la remera de los Astros porque no encontró la de los Twins.
- A la que le da vergüenza que le digamos Zurdita.
- A la que está enamorada de su perro.
- A la que se volvió a su patria.
- A la que se levanta a las 8 de la mañana un sábado y me ceba mates.
- A la que me dio una sobrina hermosa.
- A la que me dio primos y dice que está orgullosa de mi.
- A la que se fue ayer de Pragma y me hizo lagrimear.
- A la de la torta de coco.
- Al que vendió mi fitito y es como mi viejo.
- Al que me hizo de Banfield.
- A la que me dice PTT.
- A la que canta a toda voz: Soy feliiiiiiz!
- Al que se abrió una sucursal en Campana.
- A la que me hizo conocer Perpetuum Jazzile.
- Al que se hizo mi aliado cuando estábamos rodeados de diseñadores.
- A la que me dibujó el tatuaje.
- A la que me dio la vida.
- Al de las mil calzorras.
- A la que me lleva de teatro en teatro.
- A la que saluda con un fuerte HOLA LI!!!
- A la que me hizo trabajar en Pragma.
- Y al que se fue hace un tiempito de nuestras vidas pero nunca del corazón.


Gracias a todos por todos los momentos vividos.







7.15.2011

Lo que decimos y no decimos



Hay muchas frases o palabras que se sueltan al viento como quien no quiere la cosa, sin tomar mucha conciencia de lo que estamos diciendo. Hay veces que pasan rapidito y se escapan entre el ruido, pero cuando empiezo a escuchar, no puedo dejar de preguntarme y preguntar que es lo que se esta tratando de decir.

"hay que matarlos de chicos, porque crecen y son chorros"
"y si, viste como son los judíos....."
"todos los peruanos roban"
"no sabes, la chica que limpia en casa es rubia y sabe leer"
"y que queres? si son negros. Pero ojo, no digo negros de piel, negros de alma"

De todas las veces que la escuché y pregunté que es lo que estaban tratando de decir, nadie pudo explicarme la diferencia entre las almas negras y las del resto de los colores y como es que se distinguen.

Todas estas frases las escuche, y algunas demasiadas veces.

Por casualidad o no, de un tiempo a esta parte, conocí gente que trabaja con chicos de bajos recursos, chicos que no pudieron terminar el colegio y quieren estudiar, poder conseguir un trabajo y sentirse un poco menos marginales. Chicos que usan gorras y equipos de gimnasia como cualquier otro, chicos que viven en una villa, que para cenar tienen que tomar tren, colectivo y caminar por calles embarradas.
Chicos que no tuvieron la suerte que tuvimos otros, de poder crecer bajo un techo, sin tener que preocuparse durante toda su niñez de otra cosa que no sea jugar e ir al colegio.

Estos chicos tienen que enfrentarse con mucha gente todos los días que los miran mal, que cuando se les acercan guardan el celular y agarran fuerte la cartera, que cuando ofrecen la mano en el subte acompañada de un calendario o una estampita, se los ignora por completo.

Creo que nos está fallando la varita con que medimos. 
Estaría bueno que podamos valorar a las personas por sus actos y no por una marca, que entendamos que un color no es mas que eso, un color y que  no puede ser una frontera para compartir un mate, que el lugar donde nacimos no nos da ningún derecho a prejuzgar y que la fe que tengamos o dejemos de tener no hace que el otro se convierta en un enemigo.

Podemos hacer la diferencia con un gesto, con un caramelo, con mirar a los ojos.
Tenemos que escucharnos un poco mas, compartir un poco mas, dar una mano, un abrazo. 
Hagamos la prueba.